ETAPA 15.

Audiencia privada con su Santidad el Papa Pío XII (Castelgandolfo).

 

Dos días después de llegar a Roma, el 18 de septiembre, visitan a Su Santidad en audiencia privada, en su residencia veraniega de Castelgandolfo.

Conforme se acercan desde Roma, el Palacio Pontificio apenas se hace visible por la frondosa vegetación del parque que le rodea. Por culpa de una avería del autocar que los transporta, llegan con treinta minutos de retraso para la hora de la audiencia concedida. Pero Su Santidad, perdonando la demora, les dice con cariñoso reproche: ¡“españoles para todo”!...

Y ante el Papa llegan con emoción incontenible y con el cansancio a cuestas y con las 610 millas - 1129 kilómetros - de travesía peregrinante. Veinte minutos les ha concedido Su Santidad en la audiencia. A lo largo de ella, y a su petición, escucha el relato de la peregrinación. Luego, de sus manos, recibimos una medalla como recuerdo del Año Santo.

Termina la audiencia. El fotógrafo pontificio perpetúa el momento. Y el desbordado entusiasmo rompe el protocolo con vítores y aplausos, que Su Santidad con gesto amable y cariñoso acalla. Y elevando al cielo sus brazos, los baja lentamente y con una solemnidad sencilla y con una elegancia suprema, traza con su mano derecha la triple cruz de su bendición apostólica sobre todos.

Y con la bendición termina la audiencia que les concedió Su Santidad. Aquí, en Castelgandolfo, dejan un remo y la piragua capitana “Virgen del Pilar” como ofrenda, testimonio y recuerdo de la empresa.

 

Esta es la única piragua que está localizada pero no se si aún existe. He intentado contactar con el Vaticano mandando varios mail pero hasta la fecha de hoy, no he tenido respuesta. ¿Y las otras dos piraguas? Se que estuvieron expuestas en su día en Madrid en el Museo de la Armada. Estuve en el museo pero me comentaron que efectivamente, se expusieron pero en depósito. Una vez terminada la exposición se devolvieron y nunca más se supo de ellas. Descubrí en Ribadesella dos piraguas que parecían las mismas, pero no, eran de aluminio y estas fueron hechas para una siguiente aventura que no llego a buen término (San Sebastian - Dublín 1952), en la que había algunos integrantes del SEU, pero esta es otra historia.